13 marzo 2007

Por fin hemos bajado de hándicap



Ha costado lo suyo, en mi caso más de un año, pero por fin hemos notado la magnífica sensación que da el hecho de bajar de hándicap por primera vez.

Mi hijo Sergi hizo una vuelta sensacional el sábado pasado en Badalona. Hizo 73 golpes, incluido un birdie en el 7 corto, y esa gran actuación le ha valido bajar a 19.8. Un servidor, que tres días antes ya había sido 'desvirgado' del 21 al 19.8 en Castell de Godmar, también hizo un gran recorrido y ahora estoy en 16.8.

Sin embargo, la satisfacción que desbordo ahora mismo no es por ese 16.8, sino por el 19.8 de mi hijo. Se empeñó en hacerlo bien. Toni, su profe en Badalona, le ha instruido muy bien, con alguna bronca incluida porque el crío se las trae, pero el chaval lo ha asimilado a la perfección y ahora se ven los resultados.

Desde aquí quiero animar a todos esos jugadores que buscan bajar hándicap por primera vez. No hay que desesperar. Yo he tardado un año y tres meses. Paciencia porque esa sensación sólo se vive una vez... y hay que saborearla. Vale la pena.

Por último, quiero dar las gracias a todos los que han hecho posible este pequeño 'milagro' del p&p. No voy a dar nombres, porque son muchos, pero sí lo resumiré: al equipo Pares Badalona, al resto de padres de los chavales que aprenden allí, a los propios chavales que van allí a clase, a los profes, a los responsables del club, a todos con los que he jugado y, por supuesto, a mi familia, mi padre, mi mujer (cuanta paciencia tiene la chica) y a mis hijos (por ellos seguramente ahora soy más feliz).


En la imagen, Sergi en el Interclubs Infantil de Vallromanes