Nervios

Reconozco que hoy estoy más nervioso de lo habitual. Mi manera de ser, por norma, ya hace que sea inquieto por naturaleza, pero lo de hoy lo supera todo. Mañana hay Interclubs de Can Cuyàs. La última prueba de este año y... ¡¡¡ESTOY CONVOCADO!!!

Por fin ha llegado ese día en el que puedo demostrar, con mis habilidades con un palo y una bolita, poder jugar con mis compañeros de equipo e intentar hacerlo lo mejor posible. Ya sé que no va a ser fácil. También sé que los nervios me van a traicionar. Tengo excusa: dos años esperando este momento no pasan en balde y dan para pensar bastante en por qué no he jugado antes con mis dos equipos, el Pares i el PiM.

Con el Pares no pude jugar por hándicap y otros compromisos que tenía de antes. Bueno, total es un juego. Sí pero no. Este año, que ya podía jugar las seis pruebas (lógicamente el capitán convoca y elige a los que cree que están mejor) no ha podido ser tampoco por la operación a que fui sometido en abril. Pero ahora, por fin, ya estoy en la línea de salida esperando el pistoletazo para empezar a dar golpes junto a mi compañero José Luis.

Mi resultado final no me va a importar nada. Al menos así lo afronto yo, pero sí que importa hacer el mínimo número de golpes por el bien del equipo. Por mí no va a quedar. Amunt PiM y ¡A por ellos!