Mucho Tiger, sí, pero menos

Todo el mundo sabe que Tiger Woods es el mejor golfista actual y, seguramente, de todos los tiempos desde que el golf existe. El norteamericano puede batir todos los récords del mundo habidos y por haber, pero quizás le sobra algo de soberbia.

No niego que es uno de mis ídolos y, lógicamente, mi hijo le tiene como un 'dios', pero ayer me cayó un poco a los pies por unas declaraciones suyas. Seguramente he afilado mucho a la hora de escribir este artículo, pero es como lo veo yo.

Tiger declaró ayer en el diario The Mirror que "creo que puedo ganar todos los torneos del año. Ganarlo todo es mi intención y estoy haciendo golpes que nunca antes he tenido".

¿Soberbia?, ¿sobradillo?... Un servidor, en su lugar, no hubiera dicho semejante sandez. Sólo por respeto a sus rivales debería haber enfocado su respuesta de otra manera, pero él quiere ganarlo todo. Sus rivales lo tienen fácil: que juegue él solo y los demás que se disputen ya la segunda plaza.

Ya tengo palos nuevos
Por fin he podido comprar unos palos en condiciones. No son la octava maravilla del mundo, pero para mi nivel creo que son suficientes. No he querido comprarme una marca cara porque considero que con los Inesis Canaveral 500, que son los que he adquirido, me va a ir bien. Confío en que las cosas me salgan bien con ellos. De esta manera, entierro definitivamente los Dunlop de acero que me dio mi compañero de trabajo Santi Malia y que tan bien me han ido hasta ahora. Creo que era el momento idóneo para renovar el material. Los estrenaré de manera oficial en un torneo que hemos organizado los de Mundo Deportivo en Can Bosch el viernes.

Los palos los podéis ver en la web de Inesis