09 noviembre 2005

Salsa rosa caducada


Un equipo del programa Salsa Rosa realizó hace unos días una persecución por la M-30 madrileña para captar imágenes de Max Badayi, 'ex' de Sofía Mazagatos. Badayi era perseguido por un individuo que aseguró que le debía dinero y que por eso fue a por él. Estos son los riesgos de ser reportero rosa, aunque la vida no sólo se la juegan ellos. Los demás, a quienes este tipo de periodismo nos importa más bien nada, también estamos lamentablemente en el ajo

Los programas televisivos del corazón siguen de moda. Salsa Rosa es su mascarón de proa actualmente. Este programa de Telecinco arrasa cada semana con sus cuchicheos sobre famosos, pero lo que no sabe el telespectador es que para conseguir una exclusiva (ya ven la importancia que tiene esto del corazón) sus reporteros son capaces de organizar una carrera de Fórmula 1 por una ciudad con el fin de sacar una instantánea a alguien famosillo.

Esto es lo que pasó con el ex compañero de Sofía Mazagatos, que fue perseguido por un supueso 'cobrador del frac' y, detrás de ellos, toda una legión de periodistas. A velocidades que pasaban de largo el límite en la M-30, el perseguidor logró sacar de la calzada a Max Badayi y éste acabó en urgencias de un hospital con un amago de infarto.

¿Vale la pena jugarse la vida, la propia y la de los demás, para sacar una foto o hacer un reportaje de un famoso?. Todos recordamos el trágico final que tuvo Diana Spencer, duquesa de Gales, con su 'amado' Al-Fayed. Insisto. ¿Vale la pena?

Dejen a los famosos en paz, que también los demás conciudadanos respiraremos tranquilos y lo agradeceremos.

No hay comentarios: