El diablo, con el rabo mata moscas

Esta es una frase hecha muy célebre y antigua. Y es aplicable a cualquiera, sobre todo a vagos, gandules, maleantes y similares.

Quizás éste no sea el mejor sitio para hacer este tipo de comentarios, pero la verdad es que hay 4 'mataos' (no llegan a contarse ni con los dedos de una mano) que están a mi alrededor, en mi entorno, que además de ser caraduras, 'jesuseros' o 'tartufos' son tocahuevos (espero que me perdonéis esta expresión), maleducados y, sobre todo, cobardes. Lanzan la piedra y esconden la mano, algo muy típico en este país.

No voy a negar que 'alguien' del ciberespacio internauta me ha dejado un comentario soez en el texto referido a las prostitutas de Barcelona. El comentario está borrado, evidentemente, porque éste es mi espacio, y declaraciones de ese tipo no las admito. El comentario venía a decir, más o menos, que yo trabajara más y mejor en la empresa que me paga. Tiene toda la razón del mundo, pero él o ella se lo puede aplicar también.

Seguramente, su única neurona no dará para pensar que esto de los blogs es para expresar lo que uno lleva dentro. Él la ha utilizado para hacer daño. Y, como me ha pillado con la guardia baja, bueno, prácticamente sin guardia, lo ha conseguido, si no yo no estaría escribiendo ahora de ese personajillo que, como yo, seguramente podría trabajar más y mejor en la empresa que le paga. Pero yo doy la cara.