La maldita 'C' de carretera

Dicen que las tres 'C' son las principales causas de muerte en nuestro país. C de carretera, C de corazón y C de cáncer. Una de ellas, la de carretera, fue el pasado día de San Esteban, 26 de diciembre, más maldita que nunca.

Un chaval, Kevin, del colegio de mis hijos fue a pasar las vacaciones navideñas al pueblo, como tanta gente hace en estas fechas tan señaladas. De regreso, 'el de arriba' decidió que le había llegado su hora. El coche en el que iba, junto a su padre y una amiga, fue engullido literalmente por tres camiones en Bujaraloz. Los tres fallecieron en el acto.

13 años tenía Kevin, 13. Con toda la vida por delante, un futuro prometedor... Todo se truncó en un segundo. El colegio Nuestra Señora del Rosario, de la calle Mallorca de Barcelona, está de luto. La carretera, una vez más, volvió a ganar esa estúpida carrera por la vida.

Este suceso me ha llevado a recapacitar muchas cosas. ¿Vale la pena luchar por algo? ¡Pero si no dependemos de nadie humano, sólo del 'de arriba'! Cuando me he enterado de la noticia, se me ha helado la sangre, y lo primero que he hecho ha sido pensar en mis hijos. Son inocentes, no tienen culpa de nada, pero la carretera no perdona. No entiende de edades ni sentimientos.

Mañana volveré a coger el coche, como cada día, e intentaré abstraerme de todo esto. Como si no hubiera pasado nada. Y de hecho, es así. No somos nada. Nada.

La imagen es de Efe y corresponde a ese accidente. La he puesto para concienciar a los que me lean aquí.